Recuperando la antigua tradición de los personajes callejeros que entretenían a la gente con música, poesía e historias que contaban con una gracia especial, se llevó a cabo el fin de semana pasado, la presentación de los cuentacuentos del grupo “juglares” en la “Casa Teatro”, espacio cultural independiente de San Cristóbal de Las Casas.
Juglares es un grupo que se gesta a raíz de un taller realizado por el afamado narrador “Nacho cuentacuentos” proveniente de la península ibérica, quien instruye a varias personas en el arte de la descripción y relato de historias a través de la palabra oral, es ahí que se conocen quienes forman el grupo “juglares” en referencia a aquellos personajes de la Europa medieval que iban de pueblo en pueblo narrando aventuras, leyendas e informando sobre los acontecimientos de aquella época, además de ejecutar instrumentos musicales y cantar para deleite del público.
En esta ocasión fueron dos cuentacuentos los encargados de transportar por más de una hora a los asistentes a sitios remotos gracias a la minuciosa descripción de ambientes y personajes plasmados en textos de escritores como: Mario Vargas Llosa, Horacio Quiroga, Mario Benedetti, Fernando Vallejo, Miguel Torga y rescatando un fragmento del Popol Vuh que es por si sola una maravillosa percepción maya del origen de universo y la humanidad.
En entrevista Oscar Cruz y Gabriel Hernández, comerciante y bibliotecario del centro de investigaciones de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas en San Cristóbal, respectivamente, nos platican que en un principio el grupo estaba conformado por doce personas, incluso había un par de niñas que participaban con ellos, lo que les permitía realizar frecuentes presentaciones en diversos foros de la ciudad pero con el paso del tiempo el grupo se redujo a la dupla con que charlamos.
En este mismo sentido nos comentan que aun cuando han recibido invitaciones para contar cuentos en espacios de mayor aforo o al aire libre, ellos prefieren los sitios pequeños y cerrados “se da mucho más la situación de comunicación energética entre la gente que está escuchando y quien esta al frente, es un momento mas intimo” nos dice Gabriel quien también nos platica sobre la manera en que elige los textos “en mi caso, que también escribo, la selección de los cuentos la hago pensando ¿Cómo me hubiera gustado escribirlo yo? Para tratar de integrarlo y hacerlo en el momento que lo estoy contando como si de verdad fuera mío”.
Finalmente ,a manera de invitación nos dicen: “que se permitan escuchar una hora de mentiras que los van hacer pasar un buen rato, que en estos tiempos funciona como una buena distracción”, “a la gente le gusta que le cuenten cosas, pero no saben donde se las cuentan”, así que hay que mantenerse al pendiente de las presentaciones de los cuentacuentos del grupo juglares.
Juglares es un grupo que se gesta a raíz de un taller realizado por el afamado narrador “Nacho cuentacuentos” proveniente de la península ibérica, quien instruye a varias personas en el arte de la descripción y relato de historias a través de la palabra oral, es ahí que se conocen quienes forman el grupo “juglares” en referencia a aquellos personajes de la Europa medieval que iban de pueblo en pueblo narrando aventuras, leyendas e informando sobre los acontecimientos de aquella época, además de ejecutar instrumentos musicales y cantar para deleite del público.
En esta ocasión fueron dos cuentacuentos los encargados de transportar por más de una hora a los asistentes a sitios remotos gracias a la minuciosa descripción de ambientes y personajes plasmados en textos de escritores como: Mario Vargas Llosa, Horacio Quiroga, Mario Benedetti, Fernando Vallejo, Miguel Torga y rescatando un fragmento del Popol Vuh que es por si sola una maravillosa percepción maya del origen de universo y la humanidad.
En entrevista Oscar Cruz y Gabriel Hernández, comerciante y bibliotecario del centro de investigaciones de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas en San Cristóbal, respectivamente, nos platican que en un principio el grupo estaba conformado por doce personas, incluso había un par de niñas que participaban con ellos, lo que les permitía realizar frecuentes presentaciones en diversos foros de la ciudad pero con el paso del tiempo el grupo se redujo a la dupla con que charlamos.
En este mismo sentido nos comentan que aun cuando han recibido invitaciones para contar cuentos en espacios de mayor aforo o al aire libre, ellos prefieren los sitios pequeños y cerrados “se da mucho más la situación de comunicación energética entre la gente que está escuchando y quien esta al frente, es un momento mas intimo” nos dice Gabriel quien también nos platica sobre la manera en que elige los textos “en mi caso, que también escribo, la selección de los cuentos la hago pensando ¿Cómo me hubiera gustado escribirlo yo? Para tratar de integrarlo y hacerlo en el momento que lo estoy contando como si de verdad fuera mío”.
Finalmente ,a manera de invitación nos dicen: “que se permitan escuchar una hora de mentiras que los van hacer pasar un buen rato, que en estos tiempos funciona como una buena distracción”, “a la gente le gusta que le cuenten cosas, pero no saben donde se las cuentan”, así que hay que mantenerse al pendiente de las presentaciones de los cuentacuentos del grupo juglares.
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